Farthing, Linda y Kohl, Benjamin (2014): Evo’s Bolivia: continuity and change. Austin, Texas: University of Texas Press, 272 p.
Faguet, Jean-Paul (2012): Decentralization and popular
democracy: governance from below in Bolivia. Ann Arbor:
University of Michigan Press, 358 p.
Marco Just Quiles
Freie Universität Berlin
En las últimas dos décadas Bolivia ha sido un laboratorio para diferentes experimentos de carácter político y social. En específico, dos acontecimientos han despertado un fuerte interés dentro y fuera del mundo académico: los procesos de descentralización a mediados de los años noventa y las reformas progresistas del gobierno de Evo Morales desde la decada pasada. Ambos han sido considerados ejemplos paradigmáticos de transición. Por un lado, la reforma de descentralización de 1994 constituye una de las más rigurosamente implementadas a nivel mundial. Por otro lado, la agenda política del gobierno de Morales ha promovido medidas de inclusión social y cambios institucionales innovadores que despertaron grandes esperanzas en los círculos liberal-izquierdistas más allá de Bolivia.
La pregunta clave en los debates acompañantes ha sido la
cuestión de cómo evaluar los respectivos resultados empíricos.
Numerosos trabajos han llegado a conlusiones distintas, sobre
todo en cuanto a los impactos socio-económicos de estas reformas
(por ejemplo, Crabtree y Chaplin 2013, Ernst y Schmalz 2012, Pérez Sáinz 2014). No obstante, destacan
tres limitaciones analíticas comúnmente observables.
Primero, las evaluaciones, tanto positivas como negativas, están
sujetas en su gran mayoría a un juicio normativo y generalizado
sobre logros y fracasos de las reformas, descuidando los
múltiples factores institucionales y contextuales (geografía,
demografía, cultura) que condicionan su implementación. Con
ello, se transmite la idea errónea de que se trata de
intervenciones políticas unidimensionales que dependen
principalmente del desempeño de los actores políticos. En
realidad, el contexto institucional y local afecta fuertemente
sobre los resultados e impactos de una reforma política.
Segundo, pese a la creciente adopción del enfoque subnacional, gran parte de la literatura referida se limita a analizar los impactos de dichas reformas a nivel nacional (“nacionalismo metodológico”). Por consiguiente, el análisis padece de una grave distorsión debido a las grandes variaciones territoriales que caracterizan comunmente la implementación de una reforma a nivel local.
Tercero, pocos trabajos aplican una mirada analítica de mediano
o largo tiempo, lo que resulta imprescindible para evaluar
adecuadamente el verdadero impacto socio-económico de una
reforma. Las variables que determinan dichos resultados (por
ejemplo, la calidad de las instituciones o el contexto local)
suelen ser producto de procesos históricos y, por ende,
acumulativos.
Ante esta crítica, los dos libros aquí discutidos son ejemplos
interesantes y recomendables para todos aquellos interesados en
conocer estratégias de investigación que evitan, en gran medida,
caer en la trampa de una evaluación simplista y normativa. En su
obra, Linda Farthing (escritora independiente) y Benjamin Kohl
(Profesor de Geografía y Estudios Urbanos, Temple University †)
presentan un análisis integral y muy documentado sobre el
“proceso de cambio” desde la elección presidencial de Evo
Morales en 2005. Por otro lado, Jean-Paul Faguet (Profesor de
Economía Política de Desarrollo, London School of Economics)
explora en su libro la experiencia y los resultados del proceso
de descentralización implementado en Bolivia con la Ley de
Participación Popular (LPP) en 1994. Ambos libros tienen como
objetivo principal evaluar el impacto socio-político de los
respectivos acontecimientos. Por el hecho de diferenciarse
significativamente en su acercamiento metodológico y su
profundidad analítica, las dos obras exponen de manera ejemplar
las potencialidades y limites inherentes en las distintas
estrategias de investigación.
Farthing y Kohl eligen un acercamineto cualitativo. Su argumento
principal consiste en reslatar las particularidades históricas,
geográficas, demográficas y económicas de Bolivia que limitan
cualquier acción estatal mas allá de un programa político. Es
esta consideración de los factores macroestructurales lo que
diferencia Evo’s Bolivia de otros trabajos semejantes por que
posibilita una mirada mucho más imparcial y más equilibrada de
los procesos acontecidos. Ofreciendo un análisis integral de la
variedad de intervenciones estatales y su consiguiente impacto
cotidiano, el logro más destacable del libro es, por ende, que
evita un pensamiento en blanco y negro. Más bien brinda una
evaluación prudente sobre los logros y fracasos, pero también
sobre los márgenes de maniobra del actual gobierno boliviano. En
este sentido, los autores proponen medir los resultados
políticos desde una perspectiva de lo posible y no de lo
normativo.
El acercamiento casi etnográfico (entrevistas cualitativas y
observación participativa) sitúa de manera ilustrativa a los
individuos en el centro del análisis. Los autores procuran darle
voz a una multitud de personas, desde el propio presidente
Morales hasta activistas sociales y ciudadanos ordinarios. Con
esta decisión se presenta una dimensión de los cambios
acontecidos que va más allá de la esfera política e
institucional, abarcando acertadamente la cotidianidad. Sin
duda, este planteamiento constituye uno de los méritos
sobresalientes de esta obra, que además está escrita de manera
muy accesible para cualquier público. Especialmente el lector
con poco conocimiento sobre la materia apreciará un texto
fácilmente comprensible, agradablemente comprometedor y sobre
todo muy informado.
En nueve capítulos los autores presentan de manera panorámica
tanto los rasgos geográficos, demográficos e históricos del
país, como también el ascenso del actual partido oficialista
“Movimiento al socialismo” (MAS). Evalúan los cambios en el
ámbito político —estilo de gobierno, ampliación de derechos
sociales y política exterior— explorando sus legados intrínsecos
(limitada capacidad del aparato estatal, mercado laboral
vulnerable, conflictos étnicos) así como también sus
condicionantes externos (dependencia de la cooperación y de
organismos internacionales). Del mismo modo, Farthing y Kohl
examinan las dinámicas en el campo económico, señalando la
persistente dependencia de las exportaciones de materias primas.
También evalúan las medidas del gobierno actual en el campo de
la política social (salud, educación y protección social).
Considerando la importancia de este campo en la agenda del
actual gobierno, aquí el análisis de Farthing y Kohl carece de
profundidad, en específico por la falta de datos empíricos más
elaborados. En los últimos capítulos brindan un resumen de los
cambios de varias políticas públicas (tierra, antidrogas,
politica social) pero también de las continuidades, en especial
la persistencia del modelo económico extractivo.
La debilidad de la obra se encuentra, a pesar de referencias
aisladas a datos duros, claramente en la falta de conceptos
teóricos y métodos analíticos más elaborados, necesariamente
requeridos en la calificación compleja de las políticas
públicas. Si bien los autores hacen referencia a algunos datos
duros, el escaso uso de indicadores e instrumentos cuantitativos
impide una evaluación más robusta. Además, esta restricción
metodológica oculta la existencia de notables desigualdades
territoriales en el efecto local de los cambios iniciados por el
gobierno. Este último aspecto es crucial porque constituye un
gran reto para el desarrollo sostenible al producir nuevas
inequidades sociales. De este modo, a veces el trabajo da la
impresión de inspirarse más en el discurso político que en los
resultados medibles de las políticas públicas.
La crítica acerca de la debilidad metodológica resulta más
perceptible comparando Evo’s Bolivia con el libro de Jean-Paul
Faguet. El autor parte del caso boliviano para abordar el tema
controvertido de la descentralización y sus impactos sobre la
calidad de la gestión pública. Su acercamiento metodológico
constituye un ejemplo exitoso en la combinacón de métodos más
allá del contexto estudiado. El uso combinado de herramientas
cuantitativas (econometría) e instrumentos cualitativos (estudio
de caso), constituye sin duda la ventaja más destacable de esta
obra. Además del rigor metodológico, este libro premiado
impresiona por su madurez teórica y su refrescante estilo de
escritura. Resulta interesante que el punto de partida de Faguet
comparte, en esencia, el reclamo de Farthing y Kohl de
considerar los factores estructurales en la evaluación de
procesos de cambio en políticas públicas.
El mensaje principal del libro es que el resultado de la
descentralización depende principalmente de las características
contextuales del nivel local —la estructura social, económica y
política— y las dinámicas entre estas, causadas por las medidas
descentralizadoras. En vez de seguir la mirada normativa (“es
descentralización buena o mala”) inherente a la mayoría de
trabajos existentes, el autor propone aplicar un enfoque desde
lo local para responder a la pregunta ¿por qué algunos gobiernos
locales muestran resultados exitosos y otros no? Es decir, no se
pregunta por lo que la descentralización produce sino por los
factores contextuales que impactan sobre su resultado variado.
Este acercamiento genera un novedoso modelo teórico de
“gobernanza desde abajo” (p.199)1, que muestra cómo la interacción entre
grupos cívicos y actores económicos determinan la calidad de la
gobernanza local.
En nueve capítulos el autor desarrolla con mucha finura su
mensaje central. En el primer capítulo el autor introduce las
reformas y resultados de la descentralización en Bolivia
comparando el gasto público en diferentes sectores antes y
después de la implementación. El lector percibe una buena
impresión general sobre las particularidades del caso boliviano.
Según el autor, las reformas triunfaron por la asignación real
de recursos fiscales y competencias políticas a los gobiernos
locales. Si bien algunos indicadores utilizados parecen
debatibles (por ejemplo, el porcentaje de hogares con seguros
privados para medir la necesidad de gasto en salud o el número
de estacionamientos públicos para medir la necesidad de gasto en
transporte), hay que elogiar la exhaustiva colección de datos
subnacionales que sustentan su argumento. Antes de profundizar
en el análisis del gasto mediante un modelo más elaborado, el
autor introduce evidencia cualitativa recogida en dos municipios
bolivianos que constituyen casos opuestos en cuanto al efecto
descentralizador. Posteriormente se centra en el análisis
cuantitativo del gasto público y sus determinantes. Los
resultados indican que la descentralización ha incrementado
significativamente la receptividad del gasto público ejercida
por los gobiernos locales. No obstante, dos factores claves
parecen determinar la eficacia de la gobernanza local: la
capacidad de presión de empresas locales y la densidad
organizativa de la sociedad civil.
Después de revisar los resultados, a la luz de la literatura
existente, Faguet introduce su modelo teórico para explicar las
diferencias territoriales en la capacidad local de respuesta y
rendición de cuentas. El modelo se centra en la apertura y
competencia políticas que finalmente determinan la calidad de
los gobiernos locales. La condición de apertura y competencia,
en cambio, es endógena a la interacción entre actores del sector
privado y organizaciones cívicas. En lugares con una economía
local heterogénea y una sociedad civil activa, la competencia
política suele ser abierta, lo que incrementa la capacidad de
respuesta del gobierno local. En lugares con un ambiente
político cerrado y poca competitividad, la vigilancia y
rendición de cuentas del gobierno local tiende a ser más baja.
Entre los pocos puntos débiles destaca la escasa referencia a
literatura crítica sobre las carencias institucionales de las
reformas de descentralización en Bolivia. Entre estas, se
menciona sobre todo la asignación de recursos per cápita, efecto
multiplicador de la prosperidad fiscal de municipios de elevada
población que desfavorece a los mas pequeños. Al obviar estos
condicionantes, Faguet a veces parece demasiado optimista con el
resultado general de la descentralización. También se echa de
menos una mayor distinción conceptual entre el gasto municipal y
la cobertura real de los servicios públicos. El texto a veces
sugiere implícitamente que el aumento del gasto público
incrementa necesariamente la prestación de bienes públicos y con
ello la calidad de vida de los ciudadanos. Datos censitarios de
2001 y 2012 demuestran que esta es una suposición errónea. Por
último, una de las fuentes principales del trabajo, el Censo
Municipal de 1997, es prácticamente desconocida, incluso entre
expertos bolivianos. Aunque Faguet loablemente ha publicado
todas sus bases de datos en la red
(http://governancefrombelow.net/), se hubiera deseado una mayor
aclaración respecto al poco reconocimiento de esta fuente
fundamental.
En resumen, las dos obras presentadas ofrecen un valioso
estímulo a la reflexión sobre los retos analíticos inherentes en
el afán de evaluar el impacto de las reformas mencionadas sobre
el desarrollo en Boliva. En cuanto a la crítica de no considerar
legados históricos y factores estructurales, Farthing y Kohl
indican una dirección prometedora. Ante evaluaciones
predominantemente normativas, Evo’s Bolivia logra un análisis
equilibrado sobre los procesos de cambio en Bolivia sin ignorar
los factores contextuales que determinan los resultados
aparentemente ambivalentes. Respecto a la necesidad de vencer el
“nacionalismo metodológico”, Decentralization and popular
democracy constituye un ejemplo exitoso que además supera, con
una impresionante limpieza metodológica, las carencias
principales de los trabajos que adoptan técnicas o bien
exclusivamente cuantitativas (simplificación de fenómenos y
procesos complejos), o cualitativas (representatividad de los
resultados). Esto corresponde a la creciente exigencía de
considerar los espacios subnacionales como campos de análisis.
Bibliografía
Crabtree, J & Chaplin, A. (2013):
Bolivia: Process of Change. London; New York: Zed Books.
Ernst, T. & Schmalz, S. (2012): Un balance del primero mandato del gobierno Morales. La Paz: Plural.
Pérez Sáinz, J.P. (2014): El tercer momento rousseauniano de
América Latina. Posneoliberalismo y desigualdades sociales.
desiguALdades.net Working Paper Series 72, Berlin:
desiguALdades.net.